VISIÓN CORRECTA

Written on 07/28/2020
Cynthia Rico


Sabemos que para poder obtener una excelente cosecha, se necesita de la lluvia. La lluvia temprana es aquella que ayuda a la semilla a germinar; más tarde, cerca del momento de la cosecha, se necesita nuevamente una lluvia abundante, la cual se denomina lluvia tardía.  

Se reconoce el Pentecostés como la lluvia temprana, el derramamiento del Espíritu Santo que le dio vida a la Iglesia primitiva. En la lluvia temprana, la manifestación del Poder del Espíritu se hizo real, no sólo porque hablaron en nuevas lenguas, sino porque más de 3.000 personas recibieron la salvación y los discípulos se llenaron de valor y poder para compartir las Buenas Nuevas.

La lluvia tardía es el tiempo que tiene Dios reservado para desatar el más grande avivamiento en la tierra, es un tiempo en el cual el diablo no podrá estorbar a los hijos de Dios para que avancen predicando el Evangelio y en el cual el Señor dará fruto abundante y una gran multiplicación. Sé que Dios quiere moverse de una manera extraordinaria a través de cada uno de nosotros que somos Su Iglesia.